2 años y 2 meses de trabajos forzados y 6 meses de libertad restringida para leer la Biblia. Valery Moskalenko en libertad, pero con un veredicto de culpabilidad

Dos años y dos meses de trabajos forzados y otros seis meses de restricción de libertad: esta es la sentencia dictada a Valery Moskalenko por el Tribunal de Distrito de Zheleznodorozhny de Khabarovsk el 2 de septiembre de 2019. Al mismo tiempo, el tribunal no apoyó la petición de una pena de prisión para un creyente pacífico condenado por leer la Biblia.

En la mañana del 2 de septiembre de 2019, el juez Ivan Belykh anunció el veredicto, en el que solo apoyó parcialmente la posición de la fiscalía. El fiscal pidió que el creyente fuera enviado a prisión durante tres años en virtud de la Parte 2 del artículo 282.2 del Código Penal de la Federación de Rusia (participación en actividades extremistas). El episodio clave para la fiscalía fueron los hechos ocurridos el 21 de abril de 2018 en la sala de conferencias del complejo hotelero Yerofey. Allí, Moskalenko citó las palabras de Jesucristo del Sermón de la Montaña. Una grabación de audio de diez minutos de la lectura de este pasaje con comentarios constituyó la base de la acusación.

Después de que se anunciara el veredicto, Valery Moskalenko, de 52 años, fue puesto en libertad en la sala del tribunal para deleite de su familia y amigos. Lleva más de un año en la cárcel , desde el 2 de agosto de 2018. Antes de ser detenido, trabajó como ayudante de maquinista de locomotoras y cuidó de su madre enferma. En virtud de las condiciones de restricción de la libertad, no puede viajar fuera de Jabárovsk y debe presentarse ante la inspección penitenciaria una vez al mes.

La defensa del creyente cree que un veredicto de culpabilidad por creer en Dios y citar las palabras de Jesucristo no puede considerarse legítimo, por lo que tiene la intención de apelar el veredicto.

Además de Valery Moskalenko, otros 7 creyentes en el territorio de Jabárovsk están a la espera de sentencias por "crímenes" similares. En esta región rusa, como en muchas otras, los funcionarios encargados de hacer cumplir la ley niegan a los ciudadanos el derecho a practicar la religión de los testigos de Jehová, lo que contradice no sólo el artículo 28 de la Constitución de la Federación de Rusia, sino también la posición del Gobierno y del Presidente de la Federación de Rusia.